"San Juan del Puerto...su sitio es una llanura a la vanda Boreal de Rio Tinto, casi en frente de Moguer, y en igual distancia de Niebla, y de Huelva. Con la fertil Campiña de su Termino, u el comercio de su Ria, ha crecido la poblacion a un buen vecindario de gente honrada, y de buenos caudales".
Fragmento recogido de "Huelva Ilustrada", obra de Juan Agustín de Mora Negro y Garrocho de 1762.


domingo, 17 de marzo de 2019

Juan Pérez Mora

Juan Pérez Mora nació el 17 de marzo de 1919 en San Juan del Puerto en la calle Trigueros número 31. Sus padres fueron Manuel Pérez Tirado, de profesión labrador y Teresa Mora Macías. Este matrimonio tuvo tres hijos, Juan, el primogénito de la familia, además de Isabel y Alfonso.
Sabía leer y escribir, esto le ayudaba sin lugar a dudas para componer letras de fandangos y saetas. Desde temprana edad se le veía dotes de cantaor canturreando con los amigos, por aquel tiempo se tiene referencia de su devoción por la Virgen del Rocío, haciéndose hermano de la hermandad de la Virgen del Rocío de San Juan del Puerto a los 18 años. También cabe contar que unos años más tarde, Juan Pérez Mora fue carrero de la hermandad rociera sanjuanera. 
En 1944 se casó con Sebastiana Aquino Rodríguez con quien tuvo cuatro hijos, Manuela, Ana, Manuel y Juan.
Entre las décadas de 1950 y 1970 trabajó en la Compañía de Buitrón. Fueron en los primeros años de los 50 cuando participó en un concurso de fandangos, fue en la academia de José Antonio obteniendo el primer premio, éste sería el primero de muchos premios que alcanzaría a lo largo de su dilatada vida en el campo del fandango. Entre 1951 y 1957 Radio Nacional de España dispuso una relación de cantaores aficionados de toda la provincia de Huelva, entre ellos destacaron dos sanjuaneros, José Valladolid Briones y Juan Pérez Mora.

Libro dedicado al cantaor sanjuanero Juan Pérez Mora escrito por su hija Manuela Pérez Aquino.
A lo largo de la década de los 60 participó en "Lluvia de estrellas" y la "I Exaltación de los cantes y bailes de Huelva y su provincia" donde hubo una gran actuación de grandes cantaores onubenses.

viernes, 15 de marzo de 2019

VII Vía Crucis Nazareno del Condado

El viernes 15 de marzo se realizará en nuestro pueblo el VII Vía Crucis del Condado. Este Vía Crucis se realiza desde 2013 en diferentes pueblos del condado de Huelva.  El Vía Crucis de este año está organizado por la Ilustre Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo y María Santísima de los Dolores de San Juan del Puerto.

Cartel anunciador del VII Vía Crucis  que se desarrollará en San Juan del Puerto.
Foto: Ilustre Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo y María Santísima de los Dolores
Esta séptima edición, San Juan es la población donde se va a desarrollar, anteriormente los pueblos donde se organizó fueron en 2013 en Niebla, 2014 Rociana del Condado, 2015 en Manzanilla, 2016 Villalba del Alcor, 2017 en Escacena del Campo y el pasado año en Beas. Cada año se hace en diferentes pueblos, en total son 16 hermandades de los pueblos del condado onubense los que forman la Unión de Hermandades Nazareno del Condado correspondientes a los arciprestazgos del Condado Occidental y Oriental.

Cartel del I Vía Crucis que se llevó a cabo en 2013 en Niebla.
Foto: Sacramental de Rociana blogspot
Este año el Vía Crucis comenzará a las siete de la tarde y se desarrollará

miércoles, 13 de marzo de 2019

Fiestas de San José de 1979

Las fiestas de ese año tuvieron lugar entre los días 17 y 19 de marzo. En 1979 la Comisión de Festejos del Santo Patriarca San José tuvo una nueva junta directiva presidida por Francisco Toro Rodríguez; como vicepresidente Juan Beltrán Rebollo; secretario Manuel Onieva Rubio; como tesorero José María Márquez Minchón; siendo vocales Mateo Beltrán Rebollo, Francisco Onieva Gala, Manuel Mora Rodríguez, Manuel Mora Robles, Juan Minchón Díaz y Francisco Almaraz García.

La revista "La Traca" fue la anunciadora de las Fiestas Falleras de San José 1979

El día 17 a las nueve de la mañana fue la "plantá" de las dos fallas realizadas por Juan Martín Pérez, "Zapatito". Durante todo el día se celebraron distintas competiciones deportivas de distinta índole.
A las ocho de la tarde tuvo lugar la elección de la Reina Fallera de San José 1979. Para esto se presentaron como candidatas Conchi Díaz Bernal, Mercedes Oñós Rebollo, Manoli Sánchez Barranco, Concepción Peña Barrera, Rocío Vázquez Robles, Ana Camacho Robles y Teresa Cabrera González, siendo esta última la elegida Reina por el jurado. Sus pajes fueron Juan Bautista y Rocío Luengo Hurtado.

martes, 5 de marzo de 2019

Numeración de casas y rotulación de calles

El 5 de marzo de 1859 el consistorio sanjuanero estudió la circular publicada en enero referente a la numeración de las casas urbanas tanto en poblado como en despoblado.
En esa fecha la numeración de las casas era correlativo, ello conllevaba que cada cierto tiempo las casas no tuvieran el mismo número.
Así con esta reglamentación se quería que las casas tuvieran el mismo número y que no cambiara con asiduidad con los problemas que esto conllevaba. Se cogería la plaza más importante de la población y a partir de ésta se pondría los números a las distintas casas. Las calles se dispondrían los números impares en su acera izquierda y en la acera derecha los números pares.
Así, en San Juan del Puerto tras estudiar esta circular se eligió la Plaza de la Iglesia para distribuir los números de las distintas casas del pueblo. Se estudiaban las dos entradas de las calles y se disponía la más céntrica como partida para enumerar las distintas casas que hubiera en esa calle. Así podemos poner como ejemplo la calle Trigueros que tiene su nacimiento en la Plaza de la Iglesia, su acera izquierda tendría los números impares y su acera derecha los números pares, y así se hizo con todas las demás calles de San Juan.

La Plaza de la Iglesia fue el lugar elegido por el ayuntamiento para la distribución de la numeración de las casas en San Juan del Puerto

Esto se complementó al año siguiente, en concreto el 14 de julio de 1860, en el que se publicó una nueva circular en la que se instaba a la rotulación de las calles porque éstas por lo general, no tenían su nombre puesto.