"San Juan del Puerto...su sitio es una llanura a la vanda Boreal de Rio Tinto, casi en frente de Moguer, y en igual distancia de Niebla, y de Huelva. Con la fertil Campiña de su Termino, u el comercio de su Ria, ha crecido la poblacion a un buen vecindario de gente honrada, y de buenos caudales".
Fragmento recogido de "Huelva Ilustrada", obra de Juan Agustín de Mora Negro y Garrocho de 1762.


miércoles, 27 de diciembre de 2023

Casilla de peones camineros

La figura del peón caminero fue creada en el siglo XVIII, tuvo su apogeo en el siglo XIX, con el desarrollo de la clase burguesa, y en la centuria siguiente con la mejora de las carreteras. Las casillas de peones camineros fueron edificios de construcción sencilla normalmente de una sola planta, donde podían vivir una o dos familias. Solían tener en su fachada una puerta principal junto a dos ventanas, una a cada lado, la techumbre estaba dispuesta a dos aguas y con sus respectivas chimeneas. Aproximadamente, estas casas se distanciaban unas de otras en unos cinco kilómetros.

Por lo general, estas casas tenían adosadas, en sus dos laterales, azulejos que anunciaban la distancia en kilómetros con las localidades más cercanas e importantes. En el caso de San Juan del Puerto, la situada a pocos metros de su salida por la carretera hacía Niebla, luce dos paños de azulejos de color azul marino. En su parte superior central, y en fondo rojo, se informa de la categoría de la carretera y su número correspondiente en color blanco, en este caso N-431. Más abajo, también en color blanco y en mayor tamaño, se anunciaba dos poblaciones, en un lado de esta casilla se informaba de la separación en kilómetros entre la casilla de Huelva y San Juan del Puerto y por el otro con Sevilla y Niebla. 

Carteles cerámicos indicando la distancia en kilómetros desde la casilla a las poblaciones más cercanas e importantes que discurría por esta carretera.
Foto: Huelva Noticias

Además de la casa del peón caminero situada en la salida hacía la localidad vecina de Niebla, podemos decir que había otra en el término municipal de San Juan que estaba situada cerca del puente sobre el arroyo Candón, en la actualidad desaparecida. Los inquilinos de esta casa tenían la función de reparación de la calzada correspondiente y también del puente cercano. 

Las casillas de peones camineros eran construcciones muy sencillas, de una sola planta. Un ejemplo de casilla es la foto donde se puede visionar el plano del alzado y de su planta interior. 
Imagen recogida del blog "Las carreteras de Extremadura" 

De las principales funciones del peón caminero podemos destacar que el tramo de carretera que le correspondía estuviera en aptas condiciones de tránsito, de comunicar cualquier incidencia a la autoridad pertinente o a su jefe superior y desempeñar en su tramo el cargo de policía. El reglamento de 1909, que regulaba a los peones capataces y peones camineros, disponía que se podía optar a trabajar como peones camineros a los hombres con edad comprendida entre 20 y 35 años; entre sus obligaciones tenían que recorrer dos veces a la semana el trozo de carretera que le correspondían desde que salía el sol hasta que se ponía, aunque se tenían horas diurnas, según las estaciones, en las que se podía descansar; acudir a cualquier urgencia de forma inmediata y si fueran trasladados a otro municipio se presentarían al alcalde para recibir el juramento de su cargo. Según el reglamento antes citado, el peón caminero podía ser despedido y tenía sus castigos y premios. En este último caso, fue la predisposición de crear montepíos o cajas de pensiones para aquellos que sufrieran cualquier accidente y no pudieran continuar trabajando, también se tenía estipulado un premio de 30 pesetas anuales a los peones camineros, 50 para los peones capataces, que se hubieran caracterizado por su trabajo y buena conducta. 

A lo largo de los años estas casillas han ido perdiendo su funcionalidad, al estar la mayoría de ellas separadas de núcleos urbanos fueron deshabitadas cayendo posteriormente en ruina y luego el tiempo las ha hecho desaparecer. Aunque todavía quedan algunas que nos hacen recordar lo importante que fueron los peones camineros para la buena conservación de las carreteras.

No hay comentarios: